RECOMENDACIÓN DE LA SEMANA: CLOSER DE JOY DIVISION.

El punto de partida es una mirada fija en lo desconocido, un suspiro entre la inpermanencia y la quietud. Después, todo ocurre de forma más sencilla. Uno se deja caer lentamente por aquel precipicio auditivo, deslizando cada parte de nuestra atención en una voz que rezumba de manera continua al fondo de la habitación.

So this is permanence, love’s shattered pride.
What once was innocence, turned on it’s side.
A cloud hangs over me, marks every move,
Deep in the memory, of what once was love.

En la vida y sobre todo en la música, hay dos cosas que aunque parecidas nunca podrán ser tomadas como iguales: lo “bueno” y lo “excelente”. Aunque dichas palabras aparezcan en el diccionario real de la lengua como semejantes o equivalentes, la verdad es otra, ambos conceptos aparentan ir por el mismo camino, pero a lo lejos muy en el horizonte estas se apartan de manera muy significativa. Mientras “lo bueno” se dirige a la senda de lo placentero y busca colarse delicadamente entre los recovecos de la satisfacción personal, lo “Excelente” trastoca e irrumpe de forma violenta en la realidad, la cual transforma, y sacude como el impacto de un martillo sobre el pavimento. Closer es un claro ejemplo de ello.

Oh how I realised how I wanted time,
Put into perspective, tried so hard to find,
Just for one moment, thought I’d found my way.
Destiny unfolded, I watched it slip away.

Excessive flashpoints, beyond all reach,
Solitary demands for all I’d like to keep.
Let’s take a ride out, see what we can find,
A valueless collection of hopes and past desires.

Lanzado en el año de 1980, Closer es un disco que marca un antes y un después dentro de la historia de la música contemporánea, un universo obscuro y bizarro que se cierne sobre una atmosfera introspectiva en donde las guitarras y las maravillosas incorporaciones de Peter Hook en el bajo, logran una comunicación devastadora para con el oyente.

Producido por la genialidad de Martin Hannett, este segundo y último álbum (oficial) de la banda Joy Division logra una notable evolución tanto en su sonido como en las letras de cada una de las piezas, las cuales están colocadas en un orden casi estratégico, que permite una travesía por el universo de esta maravillosa agrupación de finales de los 70s.
Hoy por hoy, Closer se coloca como uno de los mejores discos de las historia, una pieza que todo coleccionista y amante de la buena música debe de poseer en su archivo musical.

Esta es la recomendación que PATEANDO PIEDRAS trae para ti esta semana.

Un disco para escuchar preferente a solas y con una buena botella de whisky sobre la mesa.

I never realised the lengths I’d have to go,
All the darkest corners of a sense I didn’t know.
Just for one moment, I heard somebody call,
Looked beyond the day in hand, there’s nothing there at all.

Now that I’ve realised how it’s all gone wrong,
Gottas find some therapy, this treatment takes too long.
Deep in the heart of where sympathy held sway,
Gotta find my destiny, before it gets too late.

24 Hours. Joy Division. Closer