Skip to content

Recomendación de la Semana: Wizards.

El Otro Apocalipsis.

Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.

Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.

Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.

Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.

Revelaciones de Juan.

En cuarto grado las cosas eran un poco más complicadas de lo que aparentaban, solía tener pocos amigos y en general no era demasiado adepto a las actividades sociales, evitaba cualquier comentario inoportuno o que no era estrictamente necesario. Se trataba de un colegio de perfil religioso, adventistas para ser exactos. Por lo tanto las medidas educativas y disciplinarias en su mayoría estaban acompañadas de un riguroso sentido Teísta y moral. Parte de la rutina consistía en hacer una oración antes de cada clase, seguida de una breve canción dirigida hacia el creador o hacia algún icono cristiano. Asistir a la iglesia todos los sábados era tomado, por lo maestros como un buen gesto, mismo que lo compensaban con algún punto en determinada materia. Es por eso que a finales de ciclo escolar ese recinto de buena voluntad estaba atestado de alumnos que de manera desesperada y patética llenaban todas las butacas de la sala.

Jamás entendí mi estadía en aquel colegio, nunca fue de mi total agrado, es mas ni siquiera tenía una simpatía por mis condiscípulos, quienes a mi manera de ver, tan solo actuaban de una manera hipócrita ante los ojos de sus tutores.

Recuerdo también, y esto si de muy buena manera, que casi al terminar el día solían leernos algún pasaje de la biblia. Se trataba tal vez de historias poco trascendentales cargadas de un doble sentido, y que conllevaba a la reflexión. A decir verdad no era por esto por lo cual llamaban mi atención, sino por más bien por su narrativa y la cantidad de imágenes como de sucesos ficticios y sobrenaturales que las conformaban. La edificación de una torre tan alta capaz de llegar a los lugar más recónditos del cielo, un diluvio tan grande que inundo todo el espacio terrestre en cuestión de días, un hombre que por amor es capaz de sacrificar a su hijo, en fin toda esa clase de historias que de niño adquieren un enorme peso, y hace desvariar tu imaginación, como también pone a prueba tu ingenuidad.

Todas las noches dedicaba un tiempo a meditar sobre esas historias bíblicas, trataba de visualizarlas de manera detallada y si podía, habría campo a la especulación, y las suposiciones de eventos alternos que podían cambiar el rumbo del escrito. Fue entonces que una tarde soleada del mes de Marzo, llego a mis oídos las sentencias sagradas del libro del Apocalipsis, lo recuerdo como todo un acontecimiento como un poema que se colaba frase por frase a través de mis tímpanos y daba paso a la exaltación y a la emoción. Ríos de sangre desbordados por todos los pecadores, monstruos de 7 cabezas, trompetas celestiales encargadas del Réquiem de la existencia humana. Una oda a la tragedia de la miseria del hombre, descrita de una manera profunda y convincente.

Cinco  años más tarde quizás por azares del destino, descubriría en la sala de un amigo de la secundaria, una caricatura que arremetería de igual manera  mi subconsciente de forma impactante como aquella tarde Marzo, se trataba de :WIZARDS.

Una película animada post apocalíptica, de principios de los 80s creada por Ralph Bakshi, en la que mezcla un poco de aquella narrativa fantástica utilizada magistralmente por Tolkien o C. .S. Lewis, pero de una forma mucho mas obscura con e influenciada por la ciencia ficción.

La tecnología como arma, punzante, de doble filo, que abre paso a la devastación de la raza humana, una colisión de fuerzas que conlleva a la destrucción de todo lo conocido, y que trae como consecuencia un mundo devastado por la radioactividad. Tiempo después el planeta renace, pero acompañado de seres mitológicos y fantásticos. Como Elfos, hadas, Duendes. Aquellos  verdaderos antecesores del hombre han renacido para rectificar el camino perdido.

Es así como Delia, reina absoluta de aquel idílico mundo, procrea a dos hijos: Avatar y Blackwolf, dos magos de carácter y personalidad totalmente opuestos. Mientras que Avatar es compasivo y de corazón generoso. Blackwolf es el apóstol de la maldad y la codicia. Ambos luchan incansablemente por el nuevo mundo, trayendo consigo una sangrienta batalla en la que Blackwolf es derrotado y condenado al exilio.

Una pieza maravillosa, de finales de los años 70s, con un guion sumamente interesante y original que entre mezcla la historia y la ficción. La animación es sumamente sorprendente, la cual logra una revolución dentro del formato de este estilo de películas.

Wizards es la recomendación de esta semana en Pateando Piedras.

Una joya de la animación del siglo pasado, que hará cambiar la visión de muchos detractores del género.