Ese deseo castrante por encajar en el interior de un rompecabezas amorfo e incompleto, la necesidad absurda de satisfacer el sentimiento gregario que carcome paredes de cotidianeidad, la manía de enfilarse en los caminos del rebaño…y todas esas cosas que un mortal de características atípicas tiene que librar en las inmediaciones de la adolescencia, orillándolo a una sola conclusión: el exilio.
Freaks and Geeks, una serie que nos hace recordar el porqué de la falta de empatía y solidaridad para con la mayoría de los compañeros, quienes se divertían y gozaban de manera más que placentera, los juegos de basket, las fiestas de fin de curso o bailes de graduación.
La diferencia que marca una vida y que encierra otros mundos, otras latitudes.
Freaks and Geeks, una razón más para afirmar que los verdaderos freaks y geeks nunca estarán de moda.