Un lugar convertido en el hogar para animales rescatados o donados, y no, no solo se trata de monos, también podrás encontrar cabras, cebras, guacamayas y hasta ciervos.
Generalmente, son ejemplares que han sido afectados principalmente por acciones humanas o fenómenos naturales que afectan negativamente en el medio ambiente, impidiendo en la mayoría de los casos la reintroducción a su medio natural y por consecuencia, quedando de por vida bajo cuidado humano. Actualmente, se han rescatado más de 250 ejemplares de 50 diferentes especies.
El mayor atractivo es cuidar y apoyar a los animales, ya que muchos de los animales que llegan fueron heridos, descuidados o simplemente maltratados. Para ayudarlos se les enseña a ser autosuficientes en la selva, para posteriormente reintegrarlos a su hábitat.
Pero no lo hacen solos, con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), para tener un cuidado y atención especial se consulta con la PROFEPA para tomar la decisión si un animal se queda al cuidado del santuario.
El santuario abre de lunes a domingo con recorridos a las 10:00, 12:00, 13:00 y 15:00 horas, el recorrido tiene una duración de 2 horas aproximadamente y el precio de entrada es de $450 y $800, menores de 5 años entran gratis.
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