El informe de CNN, respaldado por testimonios de testigos presenciales y pruebas de video, plantea serias preguntas sobre la transparencia del gobierno extremista de Netanyahu, poniendo en duda su narrativa oficial.
En la noche del 29 de febrero, una entrega de ayuda humanitaria en la asediada Gaza se tornó trágica cuando soldados israelíes abrieron fuego contra una multitud de palestinos reunidos para recibir suministros alimenticios en la calle Al Rashid, la principal ruta norte-sur designada por el ejército israelí para la ayuda humanitaria. Más de 112 civiles murieron y 760 resultaron heridos en el incidente, desatando condenas globales con el enviado palestino a la ONU afirmando que decenas de las víctimas fueron “baleadas en la cabeza”.
Casi seis semanas después, el análisis detallado de CNN, que incluye testimonios de 22 testigos presenciales y una revisión de múltiples videos por parte de expertos forenses, contradice las afirmaciones del ejército israelí de que las víctimas fueron principalmente resultado de una estampida y no de disparos directos.
Los hallazgos de la cadena de televisión estadounidense sugieren que los disparos automáticos comenzaron mucho antes de lo que el ejército israelí afirma y que se dispararon tiros directamente contra la multitud en lugar de como disparos de advertencia. “El análisis de docenas de videos de la noche y testimonios de testigos presenciales arroja dudas sobre la versión de los eventos de Israel”, señaló el informe de CNN.
Añadiendo a la escrutinio, los resultados de la investigación interna del ejército israelí y la línea de tiempo posterior publicada resultaron ser inconsistentes con las pruebas de video recopiladas por CNN.
Por ejemplo, los videos con marca de tiempo muestran claramente disparos y caos, socavando la afirmación de Israel de que sus fuerzas dispararon solo disparos de advertencia para dispersar a la multitud.
Desafiando la versión israelí
Los testimonios de testigos presenciales desmantelaron aún más la versión oficial israelí. Muchos sobrevivientes relataron momentos espeluznantes de disparos dirigidos a personas que intentaban desesperadamente obtener comida.
Uno de esos relatos provino de Jihad Abu Watfa, quien estuvo en el lugar, y describió los intensos disparos que rodeaban el área de entrega de ayuda, contradiciendo la narrativa militar israelí de una operación controlada y medida.
El resultado del incidente fue sombrío, con numerosas víctimas reportadas y evidencia sustancial de heridas de bala, en contraposición a la descripción del ejército israelí de una estampida.
La investigación de CNN no solo busca desafiar la descripción oficial israelí de los eventos, sino que también cuestiona las implicaciones más amplias del compromiso militar en operaciones de ayuda civil dentro de zonas de conflicto.
Las imágenes de drones publicadas por el ejército israelí proporcionan la única documentación visual clara de la multitud reunida durante la “Masacre de la Harina”.
“Sin nada más, muestra lo difícil que habría sido disparar con algún grado de precisión a lo que las FDI describieron como ‘sospechosos’ entre las personas apiñadas que rodeaban el convoy”, concluyó el informe de CNN.