– ¿Me lleva a Moncloa, por favor?
El joven, tras indicarme su destino, sacó del bolsillo una PSP (consola de videojuegos portátil) y comenzó a jugar abstraído de las inclemencias del tráfico: pese a mis constantes frenazos, giros bruscos o gritos de claxon, no despegó ni un segundo los ojos de su pantalla. Movía la cabeza y los brazos siguiendo la dirección de su personaje (pulgares mediante) como quien trata de abrazar su propia sombra.
– ¿Le dejo aquí mismo? – pregunté.
– Mierda… sí… es aquí… ¿podría dar la vuelta a la manzana?. Estoy a punto de pasarme esta pantalla…
…
[¿Las nuevas tecnologías del entretenimiento nos liberan?, ¿nos atrapan?. ¿Nuestra Second Life se ha convertido en una First Life paralela? ¿La cultura, el arte o la inteligencia se miden ahora en bits?]
Daniel Díaz es, según sus propias palabras taxista, o taxidermista (según la piel del viajante). Escritor a tiempo parcial y lector insaciable de espejos a jornada completa. Licenciado en Espejología del Profundismo por la Universidad Asfáltica de Madrid (UAM). Bufón y escaparatista de almas. Conduce un taxi desde donde observa la vida y vive en Madrid. Escribe en el blog Ni Libre Ni Ocupado. Síguelo en twitter @simpulso
Este texto no es copyleft y ha sido reproducido únicamente con permiso del autor.
Foto: Ni libre ni ocupado