Que no digan que en este humilde blog no nos tocamos el corazón y mostramos comprensión ante los motines emocionales del presidente, Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, quien lanzó este sentido reclamo, solamente que no sabemos a quien iba dirigido, ¿a los “misteriosos desaparecedores” de Diego Fernández de Cevallos? ó ¿a algún gobernador o alto funcionario en particular?.
En el caso que fueran los primeros, ¡no se vale!, tan entretenido que estaba el duelo epistolar con los “misteriosos desaparecedores“, aunque con final digno de telenovela en horario “AAA”.
En segundo lugar, si el presidente se refiere a las numerosas fugas que se han suscitado en diversos penales de México, entonces se entiende por “ellos” a gobernadores, presidentes municipales ó al innamovible Secretario de Seguridad Pública, Genarito García Luna, de quien dependen -por cierto- las cárceles de “alta seguridad” del país.
Entonces, como dice el dicho: “hay que ir arreglando paradas”…sobre todo, poniéndole nombres y apellidos, digo, ¿para qué lanzar indirectas?, ¿porqué auto censurarse?, si tan bonito es dedicarle unas palabras al enemigo a través de la prensa.
¡Ah pero no fuera un periodista o un medio impreso que pusiera los nombres y apellidos porque luego luego levantan las cejas en Los Pinos!
(21 de diciembre de 2010)
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